Las autoridades de la DRE Cajamarca han salido a informar que el rendimiento de comprensión lectora de los estudiantes de la región apenas llega al 22 porciento mientras que en otras provincias oscila entre el 15 y el 18 porciento. Nivel bajo que debe preocupar no sólo a las autoridades, sino a los padres de familia.
La pregunta que surge es ¿no funcionaron las políticas de evaluación tanto a los alumnos como a los maestros en el gobierno aprista? Antes que hagan público los resultados de evaluación del 2009 y 2010 las autoridades, conversaba con un profesor de la zona rural de Cajamarca, quien me informaba de la realidad de niños y niñas que acuden a la escuela. Me decía que los niños olvidan rápidamente lo que les enseñan. En minutos se olvidan de las sílabas trabadas. No llevan cuaderno ni lápiz para escribir. Los padres de familia no tienen interés de la formación de sus hijos. Sólo envían a sus hijos a la escuela porque el programa Juntos les exigen.
De modo que, la respuesta a la pregunta, es que esas políticas no dieron resultados. El problema no es tanto profesor, sino sociofamiliar. La formación de los estudiantes, en comparación del siglo pasado, no es igual al de ahora. Hoy, según especialistas, el 50 porciento es responsabilidad de los padres de familia. Así que los padres de familia deben idearse estrategias de lectura en casa, porque la lectura no tanto se enseña, sino que es un hábito que debe nacer en casa. ¿Cuántos padres de familia comprar un diario y se ponen a leer frente a los hijos? ¿Cuántos de ellos compran un libro y comentan del contenido con sus hijos que ya van en el colegio? La constante es el gobiernó que entre y continué evaluando a los profesores y alumnos, sin tener en cuenta otras variables, el resultado va a ser lo mismo: niños y niñas que no comprenden lo que leen.
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