Nuevo escenario de conflicto: confrontación entre sectores políticos y población.

Tomado de SER

La convocatoria a diversas movilizaciones a favor y en contra del proyecto Conga en Cajamarca, anunciadas para los próximos días, muestran un nuevo escenario en dicha región, en el que a la polarización entre el gobierno nacional y el gobierno regional, se suma una mucho más riesgosa como es la confrontación entre los actores políticos y sectores de la población, unos liderados por Gregorio Santos y Marco Arana y otros, por Luis Guerrero y Absalón Vásquez, que por el momento se expresa en un clima de tensa calma que podría romperse ante la provocación de cualquiera de las partes.

Mientras esto ocurre en Cajamarca, en las altas esferas del poder en Lima, parecería que el conflicto ha pasado a un segundo plano, en medio de la parálisis en la que se encuentra el gobierno del Presidente Ollanta Humala desde la crisis del VRAE, donde el primer ministro Oscar Valdés sobrevive sin iniciativa alguna, esperando que llegué el mes de julio, que es la fecha probable de la renovación del gabinete.

Así, el conflicto Conga, se va convirtiendo en la oportunidad pérdida de un gobierno que parece no estar dispuesto a realizar ningún cambio sustantivo en la política minera y ambiental, y que incluso ha dejado en manos de Minera Yanacocha la decisión final sobre la viabilidad del proyecto Conga. Y, lo que es peor, que ha perdido totalmente la iniciativa de resolver los otros conflictos que vienen desarrollándose en el país, como el que enfrenta a la minera Xtrata-Tintaya con la población y las autoridades de la provincia de Espinar en Cusco.

En Noticias SER queremos expresar nuestra preocupación ante la posibilidad de que el gobierno responda con medidas represivas a las movilizaciones en contra de los proyectos mineros, pero también por aquellas situaciones de violencia que puedan surgir entre los diversos actores políticos a favor y en contra de la minería, ya que experiencias pasadas nos muestran que cuando se enfrenta la población entre sí, es cuando mayor violencia se produce.