Reventó la Zanja. El proyecto minero la Zanja, que se ubica en la región Cajamarca, reventó en violencia. Los resultados de los enfrentamientos son de trabajadores heridos por perdigones y asfixiado por bombas lacrimógenas. Hubo trabajadores que tuvieron que ser auxiliados por sus compañeros ante la represión de la policía. Uno de ellos enseñó a la prensa la herida de los perdigones, sin embargo dijo que “así luchará”. Los trabajadores se enfrentaron con la policía ante el reclamo que realizaron por el no cumplimiento de compromisos y el incremento de salarios y otros abusos.
Los trabajadores, que se encontraban con cascos y chalecos de la empresa, dijeron que continuaran con sus reclamos hasta que los funcionarios responsables de la empresa minera se acerquen para tratar su problemática. Pidieron que el dueño de la empresa, Raúl Benavides, se acerque a conversar con ellos. Ratificaron que continuaran con la protesta. Preveen protesta indefinida y piden la presencia de autoridades del gobierno regional a quienes, dijeron, apoyaron para que ganen las elecciones regionales.
La empresa mineras, como lo hace las demas empresas, ante el compromiso que firman y no los cumplen, crean sus propios obstáculos. A los campesinos les meten la idea de empresarios y los motivan a crear sus empresas, pero como no tiene qué bienes y servicios que prestar porque no son personas técnicamente preparadas, los dejan de lado. Es allí donde, tarde o temprano, ante la no oferta de trabajo, protestan contra las empresas mineras. Los campesinos protestan porque están en sus territorios. El nuevo gobierno tiene que trabajar en los coflictos que aparecen pordoquier y regular la actividad minera. Caso contrario los ríos y quebradas no arrastraran aguas, sino sangre. (foto: grufides)
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