jueves, 13 de diciembre de 2012

Sacerdote Isaac Shahuano cree que la resistencia cajamarquina continúa. Premio toma con humildad.

Padre Isaac Shahuano
 Era aproximadamente las once de la mañana del jueves, cuando visitamos al  padre Isaac Shahuano en el convento de San Francisco de Cajamarca a quien la Coordinadora Nacional  de Derechos Humanos le acabe de otorgar un reconocimiento por su participación  en defensa de los derechos humanos en el conflicto Conga donde la violencia por parte de la policía, que representa al Ejecutivo del actual gobierno, fue descontrolada por todo lado.

 Al sacerdote le preguntamos del reconocimiento concedido al que el franciscano Isaac respondió que el reconocimiento lo toma como mucha responsabilidad y  humildad  en defensa de los más necesitados y que estará siempre en defensa de la vida y la paz. Se mostró contentó y motivó, al ver que el jueves último la población ha vuelto a las calles para reclamar sus aguas y que las lagunas de Conga no sean destruidas por el voraz capital, a que se continúe en la resistencia pacífica de los cajamarquinos en defensa de la vida. Pensaba que la lucha había terminado, pero al ver un buen número de manifestantes en la movilización del último jueves convocado por el Frente Ambiental de Cajamarca, reconoció que la resistencia continúa.

Como se conoce, el atrio de la iglesia Sanfrancisco, que según la historia fue la iglesia de los “indios” de Cajamarca, fue escenario que albergó a los campesinos de Bambamarca y Celendín que llegaron a la ciudad para protestar contra el proyecto minero Conga que estuvo a punto de destruir cuatro lagunas que alimentan a varias cuencas que dan vida a pueblos de Cajamarca. El padre Isaac Shahuano en el conflicto cumplió papel importante dando albergue y alimentación a los campesinos. No sólo alimentación sino también refugio ante la violenta  arremetida de la policía.     

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